Girardot ha sido azotada por fuertes vendavales que han dejado a su paso numerosas pérdidas materiales, acompañado de lluvias frecuentes que han dificultado los trabajos de restauración. En
En la madrugada los vientos huracanados, levantaron el techo, las rejas de seguridad y la lluvia empapo gran parte de los equipos. Las autoridades locales luego de enterarse del hecho se han puesto en tareas de mantenimiento que solo duraron un día, pues la naturaleza volvió a arremeter.
Al llegar a la sala y ver el desolador panorama, reflexione sobre todas aquellas personas que padecen de las inclemencias del tiempo y que no tienen la posibilidad de buscar otra alternativa de vida.
Todavía estamos esperando la ayuda de las autoridades locales, pues aun existe material en la sala que no ha sido posible evacuar
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