Un profeta puede proceder de varios estilos de vida. Puede ser joven o
anciano, con una gran educación académica o no instruido; puede ser
granjero, abogado o maestro. Los profetas de la antigüedad utilizaban
túnicas y llevaban un bastón. Los profetas modernos visten traje (terno)
y llevan portafolio. ¿Qué es entonces lo que determina que alguien es
un verdadero profeta?. ¡Un ejemplo de vocación y vida!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Profesor Julio César, muchas gracias, siempre en nuestros corazones estará el sentimiento del reconocimiento a tu bella labor como maestro, y gran persona, expresar en palabras limita lo que el pensamiento desea dias a día reconoce en usted las enseñanzas y valores a los estudiantes. Dios bendiga hoy y siempre. Éxitos.
ResponderEliminar